Museo Picasso de Barcelona
Museo Picasso Barcelona

La Municipal

Adéntrate en el mundo del genio artístico. Exploraremos el icónico Museo Picasso de Barcelona, un tesoro cultural que revela los trazos maestros y la evolución creativa de uno de los artistas más influyentes de todos los tiempos.

Sumérgete en la riqueza del arte y descubre los secretos detrás de las pinceladas de Picasso en esta emocionante travesía por el museo que rinde homenaje a su legado.

reserva entradas

No te quedes sin entrar o evita esperas muy largas!

Visita guiada

Sin colas / Duración 1 h 30 min / Guía profesional / Tamaño máximo 20 personas

35,00 € 

 

Barcelona y Picasso

Sin colas / Duración 2 hrs / Tour por el barrio siguiendo las huellas del artista en Barcelona / Entrada guiada al museo

35 €

Barcelona Museum Pass

Sin colas / Entrada a este museo y otros seis grandes de la ciudad

38 €

 

Horario de apertura:

Martes a domingo: 10 a. m. – 7 p. m.
El museo está cerrado los lunes.
Cerrado el 1 de enero, 1 de mayo, 24 de junio y 25 de diciembre. Cerrado a las 2 p. m. el 24 y 31 de diciembre.
Los jueves por la tarde a partir de las 4 p. m., la entrada al Museu Picasso es gratuita. Además, cada primer domingo del mes puedes visitar el Museo Picasso de forma gratuita.

El arte es un enigma, un reflejo de la vida y la mente de los creadores que dan vida a sus obras. En el corazón de Barcelona, se erige un lugar que desentraña los misterios del genio artístico: el Museo Picasso. 

Un rincón de la ciudad que nos permite adentrarnos en la mente del pintor más influyente del siglo XX, Pablo Picasso.

Al cruzar las puertas de este museo, nos sumergimos en una sinfonía de formas y colores que narran la evolución artística del maestro español. Desde sus primeras pinceladas hasta sus últimas creaciones, el Museo Picasso nos guía a través de los períodos más icónicos de su trayectoria, ofreciendo un viaje visual y emocional a lo largo del tiempo.

Cada sala en este laberinto de creatividad es una puerta a una nueva dimensión de Picasso. Los retratos de sus años jóvenes, las experimentaciones cubistas que desafían las normas de la perspectiva y la abstracción, y las reinterpretaciones de obras maestras clásicas nos brindan una visión única de su inagotable ingenio.

Pero este museo no es solamente una línea cronológica de su obra; es una ventana a su alma. Las paredes resuenan con el eco de sus pensamientos, luchas y amores. 

La audacia y el constante desafío a las convenciones son rasgos distintivos de Picasso, y este museo capta a la perfección esa esencia. 

El museo alberga una serie de pinturas, esculturas, cerámicas y dibujos que muestran su versatilidad y su capacidad para explorar diferentes técnicas y estilos.

La ubicación del museo, en el corazón del Barrio Gótico de Barcelona, sirve como un telón de fondo perfecto. Las calles adoquinadas y las plazas empedradas parecen estar en diálogo con las creaciones de Picasso, uniendo el presente con el pasado en un abrazo artístico.

Más allá de las obras colgadas en las paredes, el Museo Picasso también nos revela la humanidad detrás del artista. Cartas, fotografías y objetos personales nos hablan de sus amistades, sus tormentos y sus alegrías. La conexión entre el hombre y el creador es palpable en cada rincón de este espacio cultural.

Barcelona siempre ha sido un crisol de culturas y creatividad, y el Museo Picasso es el pilar de esta herencia artística. 

Es un recordatorio de que, en el mundo del arte, no hay límites ni fronteras; solo hay exploración y expresión. En cada trazo de su pincel y en cada línea de su dibujo, Picasso nos invita a un viaje profundo y conmovedor a través de su vida y su arte.

 

El Palacio Gótico

El edificio que alberga el Museo Picasso de Barcelona es un tesoro histórico en sí mismo, un vínculo tangible entre el pasado y el presente de la ciudad. Se trata de un palacio gótico conocido como el “Palau Berenguer d’Aguilar”, construido entre los siglos XIII y XIV. 

Este edificio ha sido testigo de la evolución de Barcelona a lo largo de los siglos, desde sus orígenes medievales hasta su transformación en una metrópolis moderna.

El palacio fue hogar de varias familias aristocráticas y nobles a lo largo de su historia, lo que contribuyó a su rica arquitectura y diseño. 

Sin embargo, a medida que el tiempo avanzaba, el edificio sufrió diversas modificaciones y adaptaciones para satisfacer las necesidades cambiantes de la sociedad. Durante el siglo XIX, experimentó una remodelación significativa que le otorgó un aire neoclásico y se añadieron elementos decorativos de la época.

No fue sino hasta 1963 que el Palau Berenguer d’Aguilar se convirtió en el hogar del Museo Picasso. 

Fue el propio Picasso quien eligió el edificio para albergar su colección en la ciudad que tanto amaba. Aquí, sus obras encontraron un lugar de honor y respeto, un espacio donde su legado artístico podría ser apreciado y estudiado por generaciones futuras.

El edificio mismo se convirtió en parte integral de la experiencia del museo. Las salas originales, los pasillos empedrados y los detalles arquitectónicos añaden un contexto histórico único a las obras de Picasso. 

Es como si el pasado y el presente se entrelazaran, permitiéndonos ver el arte de Picasso a través de la lente de la historia de Barcelona.

Hoy en día, el edificio que alberga el Museo Picasso sigue siendo un homenaje tangible al legado del artista y a la historia de la ciudad. Es un testimonio de la capacidad del arte para conectar diferentes épocas y culturas, y un recordatorio de la importancia de preservar y compartir nuestro patrimonio cultural.

magazine de Barcelona

¡Una experiencia única para viajeros curiosos!

Más
artículos

recibe barcelona en tu correo

Una vez al mes te enviaremos nuestro NEWSLETTER con novedades publicadas en la página web y ofertas para tu viaje la capital catalana!